Córdoba es una ciudad marcada por la huella de las culturas ibérica, romana y musulmana. Rica en tradiciones, destaca por un impresionante legado arquitectónico y una gastronomía que ha vuelto a brillar gracias a la recuperación de antiguas recetas locales. Su monumento más emblemático es la Gran Mezquita-Catedral, uno de los lugares más asombrosos del mundo. En ella conviven siglos de historia, desde la evolución del arte omeya en España hasta los estilos gótico, renacentista y barroco añadidos durante su etapa cristiana.

Situada a los pies de Sierra Nevada, Granada es una ciudad marcada por la herencia de Oriente y Occidente. Antigua capital del Reino Nazarí, sus calles aún respiran la esencia de Al-Ándalus, con callejuelas sinuosas, plazas llenas de vida y antiguos barrios moriscos cargados de historia. La Alhambra, joya de la arquitectura islámica y uno de los monumentos más emblemáticos del mundo, corona la ciudad con una belleza que trasciende el tiempo.

Sevilla, capital de Andalucía, es una ciudad universal situada a orillas del Bajo Guadalquivir, en el último punto navegable del río. A lo largo de los siglos, romanos, visigodos, musulmanes y cristianos han dejado su huella en esta tierra, y su riqueza patrimonial solo se compara con su tamaño y relevancia histórica.

Situado entre paredes de roca que alcanzan más de 100 metros de altura, el Desfiladero de los Gaitanes es uno de los paisajes más impactantes del interior de Málaga. A través de él discurre el Caminito del Rey, una pasarela suspendida que originalmente fue construida para facilitar el mantenimiento de presas y canales de agua. Hoy es una de las rutas de senderismo más famosas de España, con 7,7 km de recorrido entre senderos y tramos colgantes.

Marbella combina el encanto andaluz con el lujo internacional. Su casco antiguo de calles blancas contrasta con exclusivos beach clubs, marinas como Puerto Banús y más de una docena de campos de golf. A orillas del Mediterráneo, es sinónimo de buen clima, estilo de vida sofisticado y turismo de alto nivel.

Ronda es una joya monumental enclavada entre sierras, famosa por su impresionante Tajo y el Puente Nuevo del siglo XVIII, que lo cruza a casi 100 metros de altura. Entre callejuelas, miradores y vestigios árabes como el Arco de Felipe V o el Sillón del Moro, Ronda invita a perderse entre historia y paisaje.

Frigiliana, en la comarca de la Axarquía, es uno de los pueblos más bonitos de España. Rodeado por el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, ofrece un entorno perfecto para el senderismo y el contacto con la naturaleza. Su casco antiguo, de herencia morisca, conserva callejuelas estrechas, casas encaladas y una arquitectura popular que le valió el Primer Premio Nacional de Embellecimiento en 1982.

Mijas, declarada Conjunto Histórico-Artístico, es un encantador pueblo blanco que combina tradición andaluza con arte, cultura y vistas al Mediterráneo. Su casco antiguo conserva los Jardines y el Mirador de la Muralla, y acoge museos como el CAC con obras de Picasso, Dalí y Miró. La singular plaza de toros ovalada y el famoso burro-taxi completan una experiencia pintoresca que conquista a visitantes y residentes de todo el mundo.

Nerja es una joya costera de la Axarquía, famosa por el Balcón de Europa, un espectacular mirador sobre el mar rodeado de palmeras. Su casco urbano combina monumentos como el Acueducto del Águila y la Iglesia de El Salvador con playas céntricas de ambiente animado. Para quienes buscan más calma, las calas escondidas entre los acantilados de Maro son el rincón perfecto para relajarse, hacer snorkel o disfrutar en kayak.